COMO HACER UNA VALLA DE JARDÍN

Se trata de una valla de
baja altura, que sirve para delimitar plantas, pero no para impedir el paso. La
altura es variable en función de nuestros gustos. En este caso tiene una altura
de 30 cm.
Para realizarla, yo he
utilizado unos palos redondos que tenia guardados de una antigua valla. Los palos
tienen dos metros de largo y un diámetro de 8 cm. Al ser palos viejos estaban
bastante agrietados debido a las inclemencias meteorológicas, pero para este
fin sirven perfectamente. Son palos fáciles de encontrar en cualquier tienda de
bricolaje o jardinería.
El primer paso es partir los
palos por la mitad, obteniendo medias lunas. En mi caso el corte lo realicé con
una sierra de calar, pero lo ideal sería hacerlo con una sierra de disco. También
se puede cortar a mano, pero el trabajo es mucho más duro. Debido al deterioro considerable de los
palos, a mi me toco buscar el mejor corte siguiendo las rajas que tenían los
palos.
Una vez tenemos los palos
con sección de media luna, los cortamos a la medida que queremos (altura de la
valla), en este caso 30 cm. Como los palos eran de dos metros a mi me me salen
tres tramos de 30 cm y me queda restante un tramo de 20 cm. Para aprovechar
estos 20 cm y como necesitamos algún palo un poco más largo y con forma de
punta para clavarlos al suelo y que no se muevan. Así que a esos 20 cm los
realicé un corte trasversal antes de cortar los 30 cm colindantes, sacando de
esos 20 cm las dos puntas necesarias. En el siguiente dibujo se ve mejor a lo
que me refiero.
Cuando tenemos todos los
tramos, en mi caso 10, procedemos a montar la valla. Para ello colocaremos los
tramos con la parte plana hacia arriba, bien alineados en la parte superior.
Debemos
integrar concienzudamente los palos con punta, siempre cerca de los extremos.
Una vez esta todo bien
colocado, pondremos un trozo de alambre, cuerda o cable para sujetarlo. La mejor
alternativa seria un cable plano tipo los del teléfono. En mi caso lo que
utilice fue alambre. La cuerda tiene el problema de que se deteriora con mucha
facilidad. El alambre lo sujetaremos a los palos mediante grapas de madera. Empezaremos
con una especie de lazada, para evitar que se escape el extremo.
Seguiremos por
todos los tramos y al llegar al último, volveremos a hacer el mismo camino pero
a la inversa, para reforzar la valla, terminando nuevamente en una lazada.
Y con esto tenemos la valla
lista para colocarla donde queramos.
Una vez terminada me di
cuenta de varias cosas. Por un lado 30 cm de altura es quizás demasiado y estoy
probando a hacer vallas de 25 cm, aunque esto depende un poco del gusto y uso
que le queramos dar. Por otro lado, una punta de 20 cm de largo es excesivo, ya
que cuesta mucho clavarlo, así que el siguiente tramo de valla lo voy a
realizar de 10 cm de punta.
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