CONSTRUCCIÓN CON PERSIANAS

Se trata de una pequeña
construcción o habitáculo, que impide el contacto entre los pájaros y las
lechugas. En primer lugar se desarrollo para otro fin (un invernadero), pero
por miedo a su baja resistencia, se dedico a este otro fin. Por ello algunas
piezas (una concretamente) sobran.
La estructura se desarrollo
con una vieja persiana que encontré un día en el contenedor, y que nada más ver
pensé en que debía de hacer algo con ella.
La estructura se desarrollo
con el techo inclinado a un agua y una fuerte pendiente (debido a su primer
uso).
Como se pensó en poder
montarlo y desmontarlo rápida y cómodamente, se construyeron las distintas
piezas por separado, de tal manera que se puede retirar un sin impedir el
funcionamiento del resto de caras.
Las persianas entre si se
unieron con tornillos y tuercas (una arandela
a cada lado). Los agujeros de los tornillos si realizaron con un
taladro, teniendo la precaución de que la persiana no vibrara en exceso para
que no se fracture. Unas vez construidas las piezas, entre ellas se unieron con
bridas, gracias a unos agujeros adicionales que se realizaron por pieza (tres
en la junta del lateral alto y techo, y dos en la arista del lateral bajo).
Se ha desarrollado de tal
forma que el reparto de peso sea equitativo entre las distintas piezas, debido
a la fragilidad del material de construcción.
La caras o piezas tiene las
siguientes formas:
Lateral alto
Lateral bajo
Frontal (Puerta)
Frontal (Ventana)
Techo
Complementos (Puerta y
Ventana)
Una vez se monto la
estructura se coloco una malla de plantico sijetandolo con la ayuda de mas
bridas.
He de decir, que en contra
de todo el mundo, es una estructura que ya lleva colocada tres meses y aguanta
sin problemas al sol. Probablemente en un par de años o tres comience a
deteriorarse, ya que el plástico se daña mucho con el sol, pero no ha tenido
conste elevado, ya que el único gasto han sido los tornillos y tuercas que se
pueden recuperar una vez se decida desechar la estructura.
Finalmente decir, que con
esto, se ha podido dar un segundo uso a algo que de otra forma sería un residuo
contaminante. En mi caso los tornillos también los tenia por casa, sin uso
alguno, ya que eran muy gordos, aunque se han podido emplear para esto. De
igual forma me ocurrió con la red, que la tenía por casa de otros años.
Si nos centramos en el
coste, en mi caso han sido 7,60 €, comprando únicamente las tuercas y las
arandelas.
Comentarios
Publicar un comentario